En el ejercicio participarán cerca de 250 personas de diferentes organismos y entidades autonómicas y locales
El Servicio de Emergencias del Principado de Asturias (SEPA), en colaboración con los responsables de Química del Nalón, llevarán cabo mañana, martes 29 de noviembre, un simulacro de emergencia en las instalaciones que la fábrica tiene en Trubia, Oviedo.
La hipótesis accidental será la fuga en una conducción de nafta con su posterior incendio y formación de una nube tóxica. El incidente afectará a un total de 15 personas: 5 heridos de la empresa (2 graves y 3 leves) y 10 intoxicados también de la propia factoría.
Ante esta situación el Consejero de Presidencia y Participación Ciudadana, Guillermo Martínez, activará el Plan de Emergencia Exterior de la Empresa (PLAQUIMPA), en SITUACION 1, por un accidente en categoría 2. En este nivel, de los tres existentes, se enmarcan aquellos accidentes para los que se prevén como consecuencias posibles víctimas o daños materiales.
En el simulacro que comenzará en torno a las 10.30 horas intervendrán cerca de 250 personas de diferentes organismos, entre otros, SEPA, Ayuntamiento de Oviedo, Guardia Civil, Policía Nacional y Local, personal de IQN, distintos servicios sanitarios como SAMU-Asturias o Cruz Roja, responsables de diversas consejerías del Gobierno del Principado de Asturias y voluntarios de la agrupación de Protección Civil de Oviedo y una dotación de Bomberos voluntarios de Trubia.
El desarrollo de la emergencia será en tiempo real y sólo se forzarán determinadas situaciones para no dilatar en exceso el desarrollo del simulacro. En lo que se refiere a medios materiales el ejercicio supondrá la movilización, entre otros, de los vehículos especiales de intervención de emergencias de Bomberos del SEPA, el VAL (Vehículo de Apoyo Logístico) y el camión PMA (Puesto de Mando Avanzado), el helicóptero medicalizado del organismo autónomo y la aeronave de la Guardia Civil y dos UVI-móvil del SAMU y el furgón de riesgos químicos de bomberos del Ayuntamiento de Oviedo.
Tras el simulacro se realizará una evaluación por parte de todos los intervinientes con la que se pretende revisar y mejorar, si fuese necesario, la operatividad del plan.